Sebastián Villa se declaró inocente en el marco del juicio en su contra por ejercer violencia de género hacia su ex pareja, Daniela Cortés, en abril de 2020, en un barrio privado de la localidad bonaeresne de Canning. Según testigos, cerca de 30 barras bravas de Boca ingresaron a los pasillos de los tribunales, minutos después de la llegada del colombiano.
“El hecho que se me ha imputado nunca lo cometí”, aseguró el delantero Xeneize, en su declaración brindada este mediodía ante la jueza Claudia Dávalos, a cargo del Juzgado Correccional 2 de Lomas de Zamora, que lo juzga por “lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género y amenazas coactivas”.
“Nos conocimos a través de redes sociales, en 2018. Yo estaba jugando en (Deportes) Tolima, de pronto quedamos a una hora de distancia en avión, ocho horas en auto”, comenzó declarando Villa, y agregó:”Me compra Boca y le pido que por favor me acompañe a la revisión médica. Y vinimos a Buenos Aires”.
Sebastián Villa junto a su abogado Martín Apolo. Foto: NA.
Por otro lado, el delantero colombiano comentó que Cortés “tenía la niña (su hija) y la universidad donde estudiaba administración de empresas, creo”, y explicó que su expareja “cambió” cuando se convirtió en futbolista del cuadro de la Ribera: “No era lo mismo ser el Sebastián Villa del Tolima que el de Boca, que lo convocaban de la Selección de Colombia. Quería las contraseñas de las tarjetas, me peleaba porque quería manejarme el Instagram y yo me negaba”, alegó.
Además, el futbolista de 26 años contó que tras su venta a Boca fue “la primera vez” que le ingresó dinero: “De los 3.5 millones de dólares, a mí me queda un 8 por ciento. Entonces compramos un departamento en Medellín, y le hicimos un poder su hermana, Daniela”, expresó.
Y agregó: “Ella se enojó porque yo no quise darle la firma para que fuera dueña del departamento. ‘¿Para qué vine yo a Buenos Aires si no voy a progresar?’ me decía. Después me enteré que ese departamento que compró, estaba embargado”.
La jueza Claudia Ávalos, durante el juicio a Sebastián Villa. Foto: Télam.
Por su parte, Villa contó que como Daniela Cortés tenía “estrías” por su embarazo, le pidió plata para una operación: “Yo me gasté 14 mil dolares en operaciones, le daba todo lo que me pedía. Ella fue a Colombia y se operó. Siempre le pasaba dinero, incluso ella me robó un dinero para comprar un vehículo Audi. Ya no confiaba en ella”, dijo en una declaración en la que solo aceptó preguntas de su abogado.
Las supuestas agresiones que Sebastián Villa sufrió por parte de Daniela Cortés
Sebastián Villa contó sorprendió al tribunal contando una serie de situaciónes de violencia que vivió con su ex pareja: “Me agarró las camisetas, me arañaba, yo usaba camisetas manga larga para que mis compañeros no vena que me golpeaban en mi casa”.
“‘Negro asqueroso, si vos no sos mío, no sos de nadie. Yo no quiero que esto termine mal’, me dijo. ‘Si usted no me da el vuelo privado para Colombia y 150 mil dólares, yo le daño la carrera’. Ahí yo me asusté mucho”, contó.
Daniela Cortés y Sebastián Villa. Foto: NA.
Y sostuvo: “Mientras estoy hablando por teléfono, saco la maleta donde tenía el pasaporte. Siento un estruendo y era Daniela, que me tiró la maleta y me dañó todo el auto. Cuando llegamos a la casa de Juanfer (Quintero, ex jugador de River), estaban la tía y la hermana. Llamé a (el entonces DT de Boca) Miguel Ángel Russo y le conté que Daniela me había agredido, que me pidió dinero”.
“Luego no encontraba el pasaporte. Le digo a Juanfer: ‘Mirá que Daniela me sacó el pasaporte’. Fuimos, llegamos a la casa mía, le escribo a Cintia, le digo que estaba abajo, que le dijera a Daniela que bajara y que me diera el pasaporte. Busco el pasaporte, ella estaba bien. Agarré mis cosas y nunca más la volví a ver hasta el día de hoy”, cerró.
Esta es la última audiencia de testigos que tendrá el juicio oral. Se prevé que este lunes se fije fecha para los alegatos de la defensa y la querella y la sentencia final. Si la jueza Claudia Ávalos encuentra culpable a Villa podría recibir una pena de hasta seis años de prisión.
